Esperamos 18 años para que se llegara este día, yo pedí esa imagen, yo quería que Dios se manifestara a través de esta imagen aquí en la casa de mi papa y de mi mamá, esa fue mi ilusión desde esa fecha.
“Hoy recibimos al Señor del Dulce Nombre en la casa de la familia Sánchez Quiroz y aquí estamos, la comisión de la imagen nos pide un pasaje, nos inclinamos por “La oración del Huerto” es porque Dios nos invita a orar, a orar por nosotros, por los enfermos, por la gente de la calle, estamos acostumbrados a orar por nosotros, pero no siempre nos acordamos de orar por la gente que está a nuestro alrededor”.
Llenas de emoción, arropadas por el misticismo y por la añoranza de una madre difunta que ya no estuvo para contribuir en las tareas de montar el altar, así fueron las palabras de Jorge Sánchez Quiroz, quien accedió a compartir su experiencia y su vivencia para la realización del altar al Señor del Dulce Nombre en su casa ubicada en Avenida Francisco Sarabia número 12 en el Segundo barrio de Huejotzingo, Puebla, tierra carnavalera que después del martes de carnaval, en el reencuentro con su religiosidad viven y conviven en la visita de alrededor de 36 altares en seis semanas previas a la Semana Mayor.
Los orígenes y las interpretaciones
Se trata de una tradición Huejotzinga que data de finales del siglo XIX y principios del siglo XX, inicia con la devoción a la imagen del Señor de las 3 Caídas, que se venera en la Parroquia de Huejotzingo, cada año son 6 familias para 6 altares y se cierra la tradición con altares monumentales en la plaza de Armas, en Huejotzingo, con el Señor de las 3 Caídas y el Señor del Dulce Nombre los días jueves y viernes santos.
En la interpretación del Director de Cultura, Pablo Teyssier, la vida de los Huejotzingas transcurre alrededor de su religiosidad heredada del origen mesoamericano, cuyo centro de vida era la religiosidad, hoy para los Huejotzingas, este tipo de tradiciones se llevan a cabo por esta cosmovisión que pone en el centro la religiosidad y que les da el impulso para hacer el esfuerzo.
Sociológicamente hablando, este tipo de tradiciones permite mantener vivo el tejido social mediante la conformación de comisiones para el culto de la imagen, también a las familias, a los vecinos, los devotos ya que todos trabajan juntos para realizar el altar majestuoso que además del gasto económico, implica mucho trabajo en conjunto, y que se mantiene el tejido social por las tradiciones.
Para Pablo Teyssier, en un mundo con una idea posmoderna individualista que deja de lado la importancia del otro y a partir de ello, las cosas tienen sentido con “el otro”; pero en Huejotzingo, la importancia del vecino, del familiar, del otro devoto, del miembro de la comisión, es muy preponderante, de lo contrario no se puede llevar a cabo el altar, o el carnaval, por ejemplo, -dijo-, por ello, en la sociedad contemporánea, en la que el individualismo agobia al ser humano, es importante resaltar esta parte de la cosmovisión.
Durante el siglo XVI los franciscanos fundaron las Cofradías hoy estas se ven reflejadas, de acuerdo a algunos estudiosos del tema, en la formación de las Comisiones de cada imagen. En el convento están los penitentes, la cofradía de la Vera Cruz, con el culto a la reliquia de la Cruz de Jesús, las formaron en Europa y después en América, para hacer actos penitenciarios en Semana Santa. Se trata de formar a Laicos que se comprometen en torno al culto a una imagen.
La Vivencia de un sueño religioso y el trabajo de la colectividad
Al respecto, don Jorge Sánchez asegura que el altar de su casa fue una gran obra sin la ayuda de un diseñador exclusivo, y sostiene que Dios se manifestó en él, en su familia, en sus hermanas y en su señor padre y en demasiados amigos: “todos pusimos granitos de arena, oye ¿porque no ponemos esto? ¿porque no lo hacemos así?” Mi esposa, primos, amigos, tíos, vecinos, todos ponen su granito de arena. Dijo.
Y a continuación relata la travesía de su espera: Vamos al templo por la imagen el día viernes, y a las 20:00 horas hacemos las 14 estaciones del Vía Crisis en 3 horas, una procesión larga para llegar a la casa, donde ofrecemos una pequeña merienda de agradecimiento a los que acompañaron a la imagen.
En ese momento la Comisión me entrega la imagen con sus pertenencias y yo soy la responsable de su seguridad, en esos momentos estamos en proceso de armar el altar para terminarlo el domingo alrededor de las 15:00 horas.
Luego de una oración y de algunas alabanzas pedimos la autorización para vestir y trasladar a la imagen a su altar, siempre con oración, luego las misas el domingo y lunes a las 7 de la noche y el día martes hacemos un rosario a las cinco de la tarde, en ese momento llega nuevamente la comisión, colocamos a la imagen en su pianita y vamos de regreso a la Parroquia, antes, los fieles se despiden y contemplan al Señor del Dulce Nombre; el miércoles iniciamos a desarmar el altar.
El martes, al llegar a la Parroquia ya nos espera la familia que recibirá la imagen el próximo año; nos queda la satisfacción de que Dios se manifestó en nuestro hogar y dejo infinidad de bendiciones para todos
Durante la Cuaresma se realizan monumentales altares, cada uno representando un pasaje bíblico el cual puedes presenciar visitando los diferentes hogares que albergarán durante unos días las imágenes en tamaño real de el "Señor de las tres caídas", "Señor del Dulce Nombre", "Señor del Consuelo", "Señor del Perdón", "Señor de Nazareno", "Señor de las Maravillas", "Virgen de los dolores (Virgen de la Soledad)" y el "Señor del Santo Entierro".
Se trata de un recorrido desde su templo de origen, siete imágenes en visita, aunque la virgen de los Dolores, siempre está en la Parroquia y solo sale una vez al año en el viernes de dolores.
Con una inversión que va desde los cien mil pesos hasta donde la solvencia y la voluntad familiar lo permitan, los anfitriones de cada imagen son responsables, junto con la Comisión de cada Imagen, (que dura tres años en su encargo) de pagar la pirotecnia y las salvas de las procesiones y de la estadía de la imagen en sus respectivos domicilios, de los gastos originados por los desayunos y la comida de todos los visitantes, de los gastos de alfombras y de todo el adorno del cuadro bíblico que representarán.
Cada altar contempla elementos básicos que deben estar presentes, independientemente del cuadro bíblico que representen con su imagen, estos son, además de techar los espacios, Coronas, Toronjas con papel picado botes, de trigo o lenteja germinado, Coronas de palma, Toronjas con papel picado, Botes de germinados de trigo y lenteja.
Inicialmente había una Chirimía ubicada afuera de la casa anfitriona para que con un tambor anunciara a la gente donde está el altar, eso fue a principios del siglo XX, hoy con la modernidad, esta fue sustituida y a partir de los años 80`S se sonorizo el altar, ahora se contrata equipo de audio con música sacra, y/o música en vivo con coros cuartetos o rondallas para los servicios religiosos, tales como Eucaristía, rosarios y Vía Crusis.
En medio de la música, del olor a incienso y de las oraciones de los fieles, Jorge Sánchez concluye: todas las religiones son importantes, todos vamos hacia Dios, en la religión católica estos eventos nos ayudan a que nuestros hijos, nuestros sobrinos, sigan el mismo ejemplo, tenemos altares para muchos años, el Señor del Dulce Nombre esta pedido hasta para el 2050, nos ayuda a que se sigan fortaleciendo, aunque haya tecnología y muchas computadoras esto nos ayuda a inculcar la religión católica, todos somos cristianos, yo soy hijo de Dios y hermano de Cristo, hay que motivarnos, no hay palabras para ver la manifestaciòn de Dios en esta experiencia, dijo al perder la mirada en el altar del Señor del Dulce Nombre.
Impulso del Gobierno Municipal
De acuerdo a la interpretación del Director de Cultura, Pablo Teyssier, en el gobierno Municipal de Huejotzingo, esta añosa tradición de los altares, aún no cuenta con una base bibliográfica, todo es parte de una tradición oral. Con algunos elementos en la historia plasmada en los murales del Ex Convento de Huejotzingo que habla de las Cofradías y el inicio de las costumbres y tradición social alrededor de la semana santa en Huejotzingo.
Asegura que el estado laico tiene un prejuicio: “ser laico es ser ateo”, y no tiene libertad de culto, Pablo Teyssier argumenta que es un prejuicio que no debe ser impedimento para reconocer, en esa fe, aspectos antropológicos, sociológicos e históricos de relevancia.
Durante el actual gobierno, encabezado por el Maestro Carlos Alberto Morales Alvares, se busca un impacto para la economía local tenga un beneficio económico y para los Huejotzingas sea alentador. Para que la afluencia turística de miles sea tan importante como la de los altares monumentales, los cuales son montados en la explanada de la Plaza de Armas Fray Juan de Alameda, durante el Jueves y Viernes Santos.
